Detecta los problemas de tu empresa a tiempo

Saber identificar los problemas de tu empresa a tiempo puede suponer que la balanza no se termine de decantar hacia la quiebra.

En este post te contamos cómo identificar que algo va mal y cuáles son los problemas habituales en las empresas.

¿Cómo identificar que algo va mal?

Analiza los efectos del problema

Para comenzar, deberemos analizar los efectos visibles en el negocio, es decir, ¿Has notado una reducción en el número de ventas? ¿El equipo tarda más horas en realizar sus tareas? ¿Los clientes se quejan más que de costumbre?

Debemos tener en cuenta que en esta primera fase tendremos que revisar los números actuales para compararlos con trimestres anteriores y validarlos, es decir ¿los datos se acercan a los objetivos establecidos?

El análisis de estos puntos es una manera muy efectiva de detectar los problemas para así, poner solución lo antes posible.

Identifica la causa

En esta segunda fase del proceso, debemos indagar en el origen del problema y encasillarlo en la categoría correspondiente: empleados, procesos o cultura organizacional.

Para identificar el problema y solventarlo, necesitarás implementar una auditoría para observar la ruta que nos guía hasta el resultado negativo.

Revisa las metas

Cuando hablamos de identificar problemas de gestión, no debemos solo ceñirnos a los números. También debemos considerar el proceso de fijación de metas para el negocio.

Cuando se emprende un negocio, es necesario definir la misión, visión, valores y propósito del mismo. Es en este momento en el que debes volver a leerlos y valorarlos en función de la investigación de los problemas de la empresa.

Así, además de poder llegar a identificar los problemas del negocio, podrás comparar si estos pueden llegar a afectar al propósito de la empresa.

Feedback

Tienes que entender que, en un negocio, la disminución de las ventas no siempre es culpa del comercial, sino que su origen puede verse afectado desde el desempeño de los equipos humanos.

Para identificar los problemas dentro del área de trabajo, es primordial tomarse un tiempo para dialogar con los líderes de equipo y con los propios empleados. De esta manera, conseguirás obtener diferentes puntos de vista a cerca de las dificultades o necesidades de cada departamento.

Dialogar con tus empleados te permite tanto entender el problema, como obtener las primeras ideas acerca de las posibles soluciones.

Estudia el proceso

Los procesos de ejecución se asemejan a las piezas de un engranaje, estas deben funcionar adecuadamente tanto de forma individual como en conjunto.

Este análisis te permite revisar y tener un amplio conocimiento de los procesos, además de comprobar su funcionamiento con relación a:

• Objetivos
• Recursos
• Coste y tiempo
• Rendimiento
• Calidad

Habla con los clientes

Ellos son quienes reciben el producto o servicio que ofrece tu empresa, por lo que estamos hablando de una muy buena oportunidad para conseguir información directa de los clientes.

Pero ojo, antes de ponerlo en práctica, deberás trazar un plan para conseguir recibir opiniones de calidad por parte de los usuarios.

Las estrategias más utilizadas suelen ser: Envío de correos de seguimiento, encuestas vía SMS, incentivos o premios, concursos en redes sociales, etc.

Escribe el problema

Lo más importante de todo este trabajo, es no saltarnos el último paso.

Cuando el equipo es consciente de cuál es el problema al que se enfrentan y pueden enunciarlo con palabras, debes saber que existen más probabilidades de solución.

Por ello, ante de trasladarlo, debemos asegurarnos de redactar el nombre del problema de forma clara y concreta.

Los 10 problemas laborales más comunes:

• Suben los costes

No siempre supone un problema para el negocio, pero debemos vigilarlo para asegurarnos de que no incurrimos en gastos excesivos. De esta manera podremos evitar a largo plazo los problemas de liquidez.

• Bajan los ingresos

Es normal buscar cada mes una subida de los ingresos, sin embargo, si detectas un descenso deberás analizar las causas para asegurarte de que no se repitan en un futuro.

• La productividad desciende

Esto puede ocurrir por falta de planificación, descenso de la motivación por parte de los empleados o que se añadan nuevas dificultades. Debemos intentar mejorar cualquiera de estos factores y mantener los ritmos de productividad siempre en lo más alto posible.

• Cada vez más horas de conexión

Estamos ante un problema muy común, ya que recibir noticias o mails de la empresa en horario de descanso entre la jornada o en el domicilio, puede afectar al desgaste emocional y físico del trabajador, lo que afectará de forma directa a la productividad.

• Encasillamiento

Nos encontramos en un mundo cambiante donde debemos buscar la innovación constante. La rutina y la falta de tiempo puede provocar un encasillamiento que puede afectar de forma directa al futuro del negocio.

• Mal ambiente laboral

En este apartado debemos diferenciar el mal ambiente laboral como consecuencia o como causa. Es decir, resulta más sencillo solucionar los rifi y rafes entre dos personas determinadas, que el mal ambiente a causa del estrés, pérdida de clientes o falta de transparencia por parte de algunos trabajadores.

• Ausencia de trabajo en equipo

Cuando hablamos del trabajo en equipo nos referimos a un método donde todos los miembros interactúan y trabajan. El problema viene cuando uno o varios miembros no consiguen repartirse las funciones de forma adecuada y no rinden como el resto de los miembros.

• Líderes sin liderazgo

Debemos diferenciar entre ser líder, o ser jefe. Algunas veces, los líderes pueden llegar a colapsar y comenzar a ejercer como jefe, es decir, comenzar a imponer una actitud autoritaria, déspota y desordenada.

¿Conoces la diferencia entre jefe y líder?

• Exceso de trabajo

Desmotivación, disgusto y mala disposición en el día a día, son tres de los efectos que se llegan a producir cuando un empleado siente que trabaja más de lo que debería.

• Falta de tiempo libre

La escasez de vacaciones y el poco tiempo para la vida personal puede resultar un motivo justificado que puede llevar al empleado a renunciar, y con ello, a la pérdida de un gran talento para la empresa.

¿Tu empresa presenta alguno de estos problemas? Ya solo queda identificarlos para posteriormente, solventarlos.